Concepto

Se suele denominar obras de referencia a las obras de consulta que proporcionan acceso rápido a la información –y a las fuentes– sobre un tema o una materia determinada, pues sus contenidos están organizados con criterios alfabéticos o temáticos de manera que, para localizar los datos deseados, no es necesaria la lectura completa y secuenciada de todo el texto.

Las obras de referencia permiten localizar y comprobar datos y resolver necesidades de información muy concretas, puntuales o episódicas y, dentro de las colecciones bibliográficas, su uso es continuado y frecuente, lo que hace de ellas el tipo de fuen- tes de información más conocidas. En las bibliotecas se disponen habitualmente en ubicaciones específicas, de libre y fácil acceso para los usuarios, denominadas «secciones de referencia», «secciones de consulta» o «fondos de referencia». Por su gran demanda, así como por ser, en muchas ocasiones, publicaciones seriadas o en dife- rentes tomos y volúmenes, están excluidas del servicio de préstamo a domicilio y solo es posible consultarlas en las propias dependencias bibliotecarias.

En España, las obras de referencia eran denominadas tradicionalmente obras de consulta, hasta que paulatinamente, y como consecuencia del influjo de la bibliografía anglosajona, se ha ido extendiendo el uso del anglicismo actual, que es un calco léxico de las expresiones reference source, reference material, reference work o reference book.

Análisis

Las características más sobresalientes de las obras de referencia son las siguientes:

• Una estructuración del contenido diseñada para suministrar información de forma rápida y eficaz, y orientada hacia su lectura no secuencial.

• La información recogida se divide en entradas, artículos o definiciones, que condensan de forma sintética y clara gran cantidad de datos en espacios de poca extensión.

• Incluyen sistemas de relaciones de referencias y reenvíos entre las diferentes entradas, así como diversos tipos de índices que proporcionan posibilidades de acceso complementarias.

• Tienen tasas de obsolescencia muy altas, pues sus contenidos envejecen de forma rápida y, por tanto, se necesita publicar nuevas ediciones y realizar continuas actualizaciones de los mismos.

• Desde el punto de vista formal, suelen ser obras de autoría colectiva.

• Presentan una cobertura temática diversa: las hay generales y también especializadas.

• Su formato puede ser impreso o electrónico. Los formatos electrónicos, estén o no en línea, proporcionan un acceso al contenido más rápido, ya que incluyen sistemas de búsqueda y cuentan con enlaces de hipertexto que conectan información ubicada en sitios distintos.

Las obras de referencia se pueden clasificar atendiendo a diversos criterios, como:

• Por el ámbito temático, se distingue entre obras generales y obras especializadas.

• Por el formato y soporte, se diferencia entre obras analógicas –en papel, en vídeo– y obras digitales –en CD-ROM, en línea–.

• Por el tipo de información proporcionada, las obras de información directa o inme- diata contienen información primaria, mientras que las obras de información indirecta o diferida incluyen no la información primaria, sino la descripción de los documentos que contienen dicha información.

Entre las principales obras de referencia destacan:

• Diccionarios: reúnen un conjunto de términos propios de una lengua o de una ciencia, arte, disciplina o materia determinada, generalmente dispuestos en orden alfabético y acompañados de la definición o explicación del significado de cada uno de ellos.

Enciclopedias: presentan síntesis de conocimientos sobre todas las materias o un grupo de ellas, dispuestos en orden alfabético, temático, sistemático o incluso cronológico.

Guías: contienen información sistemática con las indicaciones o instrucciones necesarias para poder realizar una determinada actividad.

Directorios: reúnen información dispuesta en orden alfabético, cronológico o sistemático y permiten la identificación o localización de personas, objetos, organismos o lugares.

Vademécums: resuelven la consulta inmediata de datos o nociones fundamentales de uso frecuente en materias especializadas, como la farmacología o la medicina.

Catálogos: presentan relaciones ordenadas en las que se incluyen, describen y localizan o ubican conjuntos de obras, documentos, personas, objetos, etc., según principios específicos y uniformes de realización y siguiendo las directrices de una norma estandarizada.

Nomenclátores: contienen una lista alfabética de nombres de localidades, calles, sujetos o voces técnicas de una ciencia o especialidad.

Repertorios bibliográficos: relaciones de fuentes sobre una materia determinada con los elementos fundamentales que permiten su identificación.

Boletines de sumarios: posibilitan identificar el contenido de publicaciones periódicas o poligrafías mediante la inclusión de sus respectivos índices, tablas de conte- nido o sumarios.

Atlas: colecciones ordenadas de mapas y, por extensión, conjuntos de láminas, planos y diagramas.

La revolución digital que afectó al mundo editorial a mediados de los años ochenta del siglo xx ha dado lugar a diferentes cambios que se han reflejado en las dimen- siones y la apariencia, en el proceso de creación, en el tipo de información incluida –textos, imágenes, sonidos y multimedia–, en el sistema de acceso a los contenidos, en el abaratamiento de los costes de producción y en la rapidez y agilidad de la actua- lización de las ediciones de las diferentes obras de referencia.

En general, una primera oleada de obras de referencia digitales consistió en la tras- lación a formato electrónico de publicaciones analógicas preexistentes; sin embargo, con posterioridad, las obras de referencia –nativas digitales– desarrollan posibilida- des de acceso y enlazado de documentos que amplían el alcance y las prestaciones originales (Abadal, 2001).

 

 

Implicaciones

La riqueza de la información aportada por las obras de referencia, así como la varie- dad de sus tipologías documentales, permite utilizarlas en el aula con numerosos fines didácticos y en multitud de ocasiones.

Entre las obras de referencia y consulta, Wikipedia resulta de especial interés, por ser una obra correspondiente a la segunda ola digital, que no cuenta con versión previa en papel (Abadal, 2001). Nació en 2001 y en la actualidad es la enciclopedia de mayor extensión conocida hasta la fecha. Compendia y almacena información organizada de todo tipo de temas, en múltiples lenguas y con posibilidades de actualización prácticamente inmediatas, gracias al desarrollo de un proyecto colaborativo en el que participan de forma altruista un gran número de personas que elaboran, editan y comparten conocimiento a través de Internet (Cordón et al., 2010).

Wikipedia estructura la información en artículos enciclopédicos, editados mediante un programa denominado wiki, y emplea una licencia de tipo copyleft que permite que cualquier persona pueda modificar, reutilizar y distribuir libremente su contenido, respetando una serie de convenciones y acuerdos.

Cada entrada se organiza en cuatro grandes apartados: el artículo propiamente dicho, los aspectos en discusión, la edición y el historial de todas las modificaciones.

La información incluida comprende el título y subtítulo del artículo, el texto desarrollado, la tabla de contenido, las referencias utilizadas, los artículos relacionados, los enlaces externos, la bibliografía y las categorías bajo las que se clasifica el artículo.

El proceso colaborativo característico de Wikipedia permite que cualquier persona con conocimientos sobre un tema determinado y unas habilidades informáticas básicas pueda crear, modificar o comentar de forma crítica un artículo. Este carácter provoca falta de homogeneidad en la calidad de la información aportada, pues se integran en el mismo nivel y por el mismo procedimiento entradas elaboradas por grupos de investigadores y científicos reconocidos, o por personas que son seguidoras o fans de figuras del deporte, el cine o la música.

Referencias

Abadal Falgueras, E. (2001), Sistemas y servicios de información digital, Gijón: Trea.

Asociación Española de Normalización (AENOR) (1999), Documentación e
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Cordón, J. A. et al. (2010). Las enciclopedias: el caso particular de la
Wikipedia. En Cordón García, José A. et al. Las nuevas fuentes de
información. Información y búsqueda documental en el contexto de la web
2.0. (pp. 219-235). Madrid: Pirámide.

Cunha, M. B. da y Cavalcanti, C. (2008), Dicionário de Biblioteconomia e
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Diccionario de la Lengua Española (2001), Real Academia Española de la Lengua,
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López Yepes, J. (ed.) (2004), Diccionario enciclopédico de Ciencias de la
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Merlo Vega, J. A. (2009), Información y referencia en entornos digitales. Desarrollo
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Rosado Millán, M. J. et al. (2007), Criterios de clasificación de los medios de difusión
de la producción académica y científica universitaria, Madrid: Agencia de Calidad,
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Fecha de ultima modificación: 2014-02-05